Preguntas Frecuentes sobre Densitometría Ósea

La densitometría ósea es un método de diagnóstico por imágenes que utiliza rayos X de baja intensidad para evaluar la salud ósea. En esta entrevista, la Dra. Eugenia Genest, especialista en Diagnóstico por Imágenes, responde a preguntas frecuentes sobre este tema.

¿Qué es la densitometría ósea y para qué sirve?

La Dra. Genest explica que la densitometría ósea es un método de diagnóstico por imágenes que utiliza rayos X de baja intensidad para evaluar la microarquitectura ósea. Es crucial en mujeres en menopausia, hombres mayores de 70 años y aquellas personas con riesgo de osteoporosis.

Este procedimiento permite detectar baja densidad ósea, lo cual es vital para prevenir fracturas patológicas, especialmente en la cadera. Además, la densitometría de cuerpo entero analiza el tejido adiposo, la masa muscular y la ósea, lo que resulta útil en los campos de la Deportología y la Nutrición.

¿Qué tipos de densitometrías existen?

Existen varios tipos de densitometrías:

  • Densitometría en la columna lumbar y en el cuello femoral: Se utiliza para diagnosticar osteoporosis y se enfoca exclusivamente en el tejido óseo.
  • Densitometría en regiones periféricas: Se realiza en áreas como la muñeca y también se centra en el tejido óseo. Es útil para personas con prótesis de cadera o columna, ya que el material metálico puede alterar los resultados.
  • Densitometría de cuerpo entero: Esta modalidad examina la relación entre el tejido óseo, el tejido adiposo y el tejido magro (músculo). Es particularmente útil para mujeres mayores de 65 años y mujeres con menopausia precoz (antes de los 45 años).

¿Quiénes deben realizarse una densitometría?

La Dra. Genest recomienda la densitometría ósea para:

  • Mujeres mayores de 65 años, especialmente aquellas con menopausia precoz.
  • Hombres mayores de 70 años.
  • Personas que hayan tenido fracturas patológicas antes de los 40 años.
  • Pacientes que estén bajo tratamiento con corticoides durante más de 3 meses.
  • Personas con síndrome de mala absorción intestinal o hiperparatiroidismo primario.
  • Pacientes bajo tratamiento con fármacos que disminuyen la densidad mineral ósea, como la heparina.
  • Personas con antecedentes familiares de fracturas osteoporóticas, especialmente de cadera.
  • Pacientes con artritis reumatoide.